Debemos ser solidarios en cuanto se refiere a generar igualdades entre las personas. La empatia es uno de los grandes factores que influyen en que una persona sea solidaria y que respete y reconozca los derechos de las demás personas. Podemos fomentar la solidaridad de muchas maneras, por ejemplo, poniendo en practica el ser solidario, para que de esta manera podamos ser ejemplo para las demás personas y así ellas también sean solidarias.
La solidaridad es aquella que implica reconocer que todas las personas, pese a sus diferencias, gozan de los mismos derechos que les corresponden por vivir en una sociedad democrática como la nuestra. Por ejemplo:
La empatía es fundamental para ejercer la solidaridad. La empatía, específicamente, basada en derechos nos puede permitir reconocer lo que podrían estar sintiendo niñas, niños y jóvenes respecto a su anhelo de mejores oportunidades para ejercer sus derechos, y además nos ayuda a asumir la responsabilidad de construir y compartir un mundo mejor.
El primero de julio se levantó la cuarentena o aislamiento social en la mayoría de regiones del país. La responsabilidad de cuidar nuestra salud recae en cada una de las personas y los miembros de la familia, pero también en la comunidad. Sería valioso que todos los miembros de tu comunidad hagan el ejercicio de ponerse en el lugar de la otra persona. Ello contribuirá a fortalecer la solidaridad y responsabilidad.
Es un acto que se centra en la protección de derechos, ya que cada persona tiene el objetivo de resguardar la salud de las demás personas en estos tiempos de pandemia por el COVID-19.
La solidaridad y la empatía en base al reconocimiento de los derechos de todas las personas.
La empatía unida a la solidaridad basada en derechos nos permite reconocer lo que podrían estar sintiendo las personas respecto a su anhelo de mejores oportunidades para ejercer sus derechos, y además ayuda a asumir la responsabilidad de construir y compartir un mundo mejor.
Tanto la empatía y la solidaridad son bases importantes y fundamentales para forjar una sociedad que respete y reconozca los derechos de cada ciudadano. En cada espacio en el que interactuamos debemos forjar la empatía y la solidaridad para formar una convivencia más armoniosa en la que se vele y se resguarde el derecho de cada persona.